El tratamiento del lipedema no es «conservador». Es: el tratamiento.
Cuando descubrí que lo que tenía se llamaba lipedema, el panorama era muy distinto al de ahora.
No existía eso que hoy llaman “tratamiento conservador” tal cual se conoce.
Lo único que sabíamos, como mucho, era que había que cambiar la alimentación:
menos gluten, menos azúcar, fuera ultraprocesados…
Y cuanto más natural, mejor.
Eso, y rezar para que algún médico no te dijera que era “celulitis”, “grasa mal repartida” o “te sobran unos kilitos”.
Y claro, una empezaba a cuidarse desde ahí.
Sin etiquetas. Sin manual. Solo con la intuición y con la esperanza de encontrarse mejor.
Con el tiempo, empezaron a aparecer más voces, más experiencias compartidas, más especialistas con voluntad de escuchar.
Y se empezó a hablar de los pilares del lipedema:
alimentación antiinflamatoria, ejercicio adaptado, compresión, drenajes, salud mental…
A mí me gustó la imagen de las patas de la mesa: si una falla, la mesa cojea.
Ese concepto ayudó a entender que el tratamiento del lipedema no es una cosa sola, sino un enfoque global.
Un cuidado integral.
Personal, único, adaptable.
Y entonces, con la expansión de la información… llegó él: el término “tratamiento conservador”.
¿Conservador… de qué?
Yo lo leía y pensaba:
¿conservador? ¿pero qué conserva exactamente?
¿El dolor? ¿La inflamación? ¿El estancamiento?
¿Es conservador porque “mantiene” algo? ¿Porque no avanza?
Y ahí me chocaba todo.
Porque el tratamiento que yo estaba haciendo no era para “conservar”, era para mejorar mi calidad de vida.
Para recuperar movilidad. Para reducir el dolor. Para entenderme. Para cuidarme.
Entonces… ¿por qué llamarlo conservador?
Después de años de camino, experiencias compartidas y muchas charlas con otras compañeras de diagnóstico,
llegué a una conclusión.
Y no estoy sola en esto: No es conservador.
Es simplemente: el tratamiento del lipedema.
Así, sin adornos ni apellidos.
Y no, no es algo que haya que hacer antes de operarte.
Tampoco es algo que se haga después.
Ni un sustituto de la cirugía.
Ni una versión descafeinada de un tratamiento “de verdad”.
Es EL TRATAMIENTO
Tan importante como cualquier otro plan terapéutico para cualquier enfermedad crónica.
Como el control diario que necesita una persona con diabetes.
Como el plan de cuidados que sigue una persona en silla de ruedas.
Nosotras también tenemos un tratamiento. Un camino. Un cuidado que no sustituye nada, porque no hay nada que sustituir.
Y esto es clave: el lipedema no se cura. Aunque nos pese reconocer esto, mas de lo que nos pesa nuestro lipedema.
Por mucho que algunos “profesionales” insistan en venderte pinchazos milagrosos, pastillas mágicas, promesas en quirófano o ideas de que con la cirugía “ya estás curada”.
Lo nuestro viene de fábrica.
Está en nuestro ADN.
Y eso no significa resignación.
Significa que hay que cuidarlo, mimarlo, sostenerlo.
Con información real. Con respeto. Y con voz propia.
Lo hablamos con todo el corazón en el Lippypodcast
En el episodio donde entrevistamos a Noemí González, junto a Ioana y Ana Martínez Torelli, hablamos justo de esto.
De cómo muchas veces se presenta el “tratamiento conservador” como si fuera una especie de castigo previo a una cirugía.
Como si te lo tuvieras que ganar. Como si fuera una especie de trámite obligatorio antes de que te “permitan” operarte.
Como si no tuviera valor por sí mismo.
Y no.
Esto no es una dieta, ni una moda, ni un paso previo a nada.
Es el tratamiento. Nuestro tratamiento.
El que muchas llevamos haciendo años. A veces mejor, a veces peor.
El que cada una adapta a su cuerpo, a sus posibilidades, a su vida.
Porque No somos solo lipedema. (Como digo en mi canción, jeje, nuestra canción)
Somos mujeres con historias distintas, con otros diagnósticos, otras realidades, y merecemos que se nos trate con esa complejidad.
Así que desde aquí, desde este blog que nació para contar la verdad sin filtros, te lo digo claro:
💬 La próxima vez que escuches “tratamiento conservador”, no dudes en decir:
“No, gracias. Yo hago el tratamiento del lipedema.”
Porque no es menos.
Porque no es temporal.
Porque es lo que nos ayuda a vivir mejor.
Y porque lo merecemos.
🩵
Montse
@lipedemadiary
🎧 Escucha el episodio completo en el Lippypodcast, donde lo hablamos todo, sin filtros.
